El almanaque de viaje n.19

Fundado en 2010, The Travel Almanac es la primera publicación verdaderamente post-turismo. Se centra no solo en la noción tradicional de viaje físico, sino también en las formas en que el movimiento y la ubicación impregnan todos los aspectos de la vida contemporánea. Desde sus inicios, The Travel Almanac ha desempeñado un papel importante en la redefinición del género de las publicaciones de cultura pop, mostrando las opiniones del mundo creativo sobre los viajes.
Entre las páginas de esta revista han escrito algunas de las mentes más creativas de nuestro tiempo, como Harmony Korine, Collier Schorr, Richard Prince, Juergen Teller, Taryn Simon, Julia Hetta, Inez & Vinoodh, Jeremy Scott, Ryan McGinley, William Gibson , Viviane Sassen, Matthew Barney, Helmut Lang y muchos otros.
Publicado bimensualmente, The Travel Almanac combina la inmediatez y visibilidad de una revista con la longevidad y elegancia de un libro.

idioma en Inglés
Páginas: 242

NÚMERO 19
Después de un largo período de aislamiento, en el que muchos han tenido que renunciar a la consecución de sus objetivos, pero han encontrado el tiempo para imaginar futuros diferentes, este número del Travel Almanac explora el concepto de utopía: las visiones, esperanzas y predicciones que ocupan nuestra mente en los meses de "inactividad".
Entre sus páginas encontramos:
- un reportaje fotográfico inmortaliza a la nueva generación de intérpretes y modelos en la lejana Siberia, en un juego de contrastes entre fríos, viejos recuerdos y jóvenes muchachas;
- Ben Gorham nos habla de olores y perfumes;
- el ecoempresario Wilson Oryema sobre una nueva y poética visión de la sostenibilidad y la conciencia ambiental;
- el arquitecto Walter Hood sobre el futuro del urbanismo;
- la música Heartheater nos inspira con su enfoque positivo del confinamiento;
- entrevista con la artista Laurie Anderson;
- una lección de dejar ir;
- un ensayo sobre la arquitectura a ser preservada para las generaciones futuras
... y así.

Esta particular edición de The Travel Almanac se abre con un espacio en blanco, una cuadrícula que, guiados, se pide a los lectores que llenen con sus propias sensaciones y, por qué no, sus sueños.